La Ruta
Nos llevó una vieja Cootransfusa, un digno modelo del siglo pasado con problemas de caja y que tiraba un poco a la derecha. Fue capaz –todavía no entiendo cómo– de sobreponerse a una violenta trocha en donde, nos contaron mientras todavía nos peinábamos, hace quince días ‘se le rompió todo’ a un atrevido carro particular.

Pisamos tierra en este escondido corregimiento viotuno llamado San Gabriel, algo zarandeados por aquella indescifrable vía que conduce desde el Salto del Tequendama, pasa por La Victoria y que luego sigue bajando hasta Viotá. No más de un par de centenares de habitantes se pasean –es domingo– bajo un agradable clima templado mezclado con cierto aroma a café, por un territorio antaño poblado por los guerreros Panches.


Fotos por Ana Gómez
Te puede interesar también San Gabriel